Es de admirar la ética de la montaña, no solo de esta, sino la ética de la vida salvaje donde la supervivencia es el principal objetivo del día a día. Vivir no es tener una familia, viajar o tener éxito profesional, vivir es simplemente que tu corazón siga latiendo cuando te levantas al día siguiente.
Entonces, ¿Por qué hacerlo? ¿Por qué escalar las montañas más peligrosas del mundo? ¿Por qué jugarte la vida por el mero hecho de estar más alto que los demás? Es un acto romántico y puro. No hay nada que pueda que pueda decir que os hiciera entender el porqué de vivir al límite.
Citare a Lionel Terray, alpinista Francés que subió por primera vez al Makalu,, cuando le preguntaron que porque escalaba montañas, el respondió un sencillo: porque están ahí. El resto personal, la pureza de la gesta y la libertad en todo su trayecto, amigos por muchas palabras videos o fotografías que veáis nunca lo entenderéis hasta que no comencéis vuestro viaje, da igual si estáis en el Himalaya o en la sierra de Guadarrama, las sensaciones son las mismas en función de la magnitud de vuestro objetivo. Como en la vida misma, no es lo mismo apostar cien que un millón, no es lo mismo un tobillo maltrecho a un edema pulmonar a ocho mil metros de altura. Solo se trata de disfrutar de la ascensión.
Posdata: touching the void, os acercara a ello.
Dicen que el amor mueve montañas pero, ¿y si el amor es a la propia montaña?
ResponderEliminarEs entonces cuando respiras hondo y sientes el verdadero aire puro que solo te proporciona una amante como un pico nevado.
Grande Supertramp y la filosofía de la montaña, llevaba tiempo sin sentirme asi...=)
El amor deberia ser como la sangre, acude a la herida sin ser llamada.
ResponderEliminarMuy bueno sobri.
El caso es que cuando conquistas la cima de la montaña solo te encuentras rodeado de nubes, ante la grandeza de una poblacion entera que yace junto a sus faldas ajena a la inmensidad que se cierne sobre sus cabezas.
ResponderEliminarTal vez el amor sea lo mas parecido a lo que se experimenta alla arriba, pues en la ascension hacia lo mas alto cada paso que das te agota unos gramos de oxigeno pero te regala unos instantes de vida.