Y dejémoslo ahí, tan solo son personas que dejan todo por el compañero de unos metros más abajo. Perder una final de la champions en el último minuto de la prorroga a causa de un penalti injusto quizá sea la mayor de las catástrofes que puedas sufrir en un deporte convencional, pero la cosa cambia cuando en cada segundo de este partido te juegas tu vida y la de tu compañero de cordada. Cada paso lo mides al milímetro, cada vez que coges oxigeno son unos segundos más de vida, y todo por un objetivo común que es bajar todos sanos y salvos, como caballeros ganadores de una dura batalla que regresan a sus casas. Posiblemente tengamos conexión con muchas personas, amigos, novias, familiares y por ellos daríamos cualquier cosa esta claro, pero allí arriba da igual si eres amigo o no, da igual si eres buena persona o no, allí arriba nace un vinculo que te hace vivir por y para el grupo de manera que no te importe nada más que bajar con tu amigo, novia y familiar a la vez: tu compañero de cordada.
Señores esto no es un deporte, esto es alpinismo.
ALEXANDER SUPERTRAMP
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